PESTIÑOS DE MI AMIGA ENCARNA

PESTIÑOS DE MI AMIGA ENCARNA. ORIGINALES.

Ya sé que esta receta es antiquísima y muy andaluza ella, pero yo desde muy niña la vi hacer en mi casa a mi abuela y a mi madre para la semana santa, junto con las magdalenas, los hornazos y las tortas hechas de madrugada en el horno en los días previos de semana santa eran los manjares que había en mi casa en la  alacena, con ese olor que salía por la rendija de la ventilación de aquellas canastas de mimbre hechas por mi abuelo, tapadas con aquellos manteles de cuadros azules  y blancos, con aquellas picunelas de ganchillo que mi abuela le hacía con pasamanería  de seda en color azul con un lazo en cada pico y que celosamente se guardaba año tras año, para aquellos menesteres, mi madre junto con mi padre aún la siguen esta tradición en casa, pero lo de ir al horno  para hacer las magdalenas , tortas y hornazos ya hace tiempo dejaron de hacerlo,  las flores y los pestiños aún hoy lo siguen haciendo, primero las flores y al día siguiente los pestiños.
Estos son los ingredientes y los pasos a seguir.

INGREDIENTES

UN VASO DE ACEITE
ANJONJOLÍN
MATALAUVA
CÁSCARA DE LIMÓN
SAL
UNA CUCHARILLA DE LAS CAFÉ DE BICARBONATO
AZÚCAR
CANELA
DOS VASOS VINO BLANCO
UN VASO DE ANÍS DULCE

En la sartén se pone a desahumar el aceite con la cáscara de medio limón, se deja enfriar.
Después de pone harina,( un kilo más o menos) en la mesa, se hace un hoyo y en el se echa dos vasos de vino blanco, un vaso de anís dulce,  un vaso de aceite desahumado, una pizca de sal, una cucharilla de las de café de bicarbonato, matalauva y ajonjolín

Se mezcla bien todo con las manos hasta que esta masa se despegue de las manos, después con un rodillo extendemos la masa y con un cuchillo vamos cortando a trocitos.

En una sartén ponemos aceite cuando está caliente vamos echando estos trocitos cortados,  le damos la vuelta por ambos lados, los sacamos con la paleta y los ponemos a escurrir en papel de cocina para que se limpie del aceite sobrante, después  en una fuente en la que echamos medio kilo de azúcar con tres cucharadas de las de soperas de canela que previamente hemos mezclado,  se rebozan y se ponen en una fuente o plato.