ALMEJAS A LA MARINERA

Ingredientes

    _ 1 kg de almejas de Carril

     _4 dientes de ajo

     _1 cebolla

     _1 hoja de laurel

     _50 ml de aceite de oliva virgen Aceites Milenarios o Nuestra  Señora de la Encina.

     _2 cucharadas de harina de trigo Gallo

     _un puñadito de perejil picado

     _2 cucharadas de tomate frito

     _1 cucharadita de pimentón dulce de la Vera, por supuesto.

     _1/2 guindilla

     _1 vaso de vino blanco a poder ser Ribeiro.

     _Sal (al gusto):

    Es fundamental quitar bien la arena que suelen traer las almejas para que no sea molesta y no nos estropee la receta. Conviene tenerlas bastante tiempo antes de cocinarlas en una cazuela o recipiente grande. Debemos añadirles agua, un buen puñado de sal gruesa, las mejores almejas vienen de Galicia.

Preparación de las almejas a la marinera:

    Pelamos las cebollas y los ajos.  Troceamos finamente las cebollas, los dientes de ajo y el trocito de guindilla (si os  gusta ese toque picante ), deben quedar trocitos muy pequeñitos con el fin de que al final del guiso no se aprecie ninguno de los dos ingredientes.

    Ponemos la cazuela que hemos empleado para hacer las almejas al vapor con el aceite de oliva y añadimos la cebolla y el ajo. Cuando esté todo bien pochado, añadimos el pimentón de la Vera y removemos a fuego lento  que no se queme o estropeará la salsa.

    Espolvoreamos la harina en la cazuela y removemos con cuidado para mezclarla bien. El efecto de la harina con la cebolla  nos ayudará a ligar y espesar la salsa. Dejamos que se cocine tomando algo de color pero sin que se queme. Ya tenemos la base de la salsa marinera.

    Añadimos el vaso de vino blanco, en este caso he elegido un Ribeiro,  Removemos espesando la salsa y dejando que se evapore el alcohol. Introducimos lo que ha quedado del agua de hacer las almejas al vapor y el tomate frito casero. Dejamos que espese durante unos 10 minutos a fuego medio sin dejar de remover.

    Salpimentamos si es necesario aunque normalmente no es necesario añadir sal, la que deja el jugo de las almejas es suficiente

   A continuación añadimos las almejas, yo las abro en la salsa, a veces se abren al vapor y luego se añaden una vez abiertas.Ligamos la salsa y las almejas hasta que se abran removiendo con mucho cuidado, esperamos un par de minutos más con el fuego apagado hasta que las almejas se impregnen bien de la salsa.

   Servimos inmediatamente en una cazuela de barro o una bandeja grande espolvoreando con el perejil picado.

Consejillos:

     Si te gusta que tengan un puntillo más picante añade una pizca de pimentón picante además de la media guindilla.

    También podemos espesar la salsa sin harina con unas rebanadas de pan frito, añadiéndolas a la mezcla a la vez que el vino y el caldo. La salsa os quedará un poco menos ligada pero muy rica también.